Tu figura emergiendo por las sombras
acelera mis pasos y latidos,
nos miramos con brazos extendidos,
¡en el aire percibo que me nombras!
nos miramos con brazos extendidos,
¡en el aire percibo que me nombras!
Al morirme en tu talle es que te asombras
con tus ojos de luna enloquecidos
y mi cuerpo, cansado en otros nidos,
tiene sueños de anillos y de alfombras.
Nuestros pasos, cruzando los andenes,
se silencian perdidos entre besos
que incendiados consumen ambas sienes.
Al dejar la estación saliendo ilesos,
paradoja de amores y de trenes,
la pasión nos libera y somos presos.
©
2022 Ariel Albornoz (Soneto melódico).
“Las
vías del vagón” (1918); Joan Miró.